el tren


No sé ni por dónde empezar a escribir debido a la gran cantidad de cosas que he observado en este viaje en tren desde Irún a Barcelona. 
En primer lugar voy a exponer mi caso. Yo tenía un billete desde San Sebastián a Barcelona. Debido a un tema personal miré desde dónde podría coger ese mismo tren pero desde una estación anterior a San Sebastián. Desde la página web decía que desde Irún. Así que me dispuse a comprar un billete pero no me cuadraban los horarios. Decido llamar a atención al cliente de vuestra compañía para preguntarlo, así seguro que cojo el billete correcto. Le expongo a la señorita que me atiende ESPECIFICÁNDOLE QUE NO QUIERO CAMBIARME DE TREN, a ver si existe la posibilidad de coger el mismo tren antes. (Ya que tenéis las conversaciones grabadas, podéis recuperarla).

Resumiendo la conversación, me dice que sí. Y me vende el billete por teléfono. Cobrándome 11,60€. Me sorprende este precio y lo comento en voz alta. Ostras, desde San Sebastián a Barcelona 571,2km me cuestan 38,80€ y de Irún a San Sebastián con 22,40km, me cuesta 11,60€.

Llego a la estación de Irún y empiezo a ver que los trabajadores no son, digamos, lo que se dice educados y amables. No todos. Algunos. Otros, hay que decirlo, son muy amables. 
Nos ponemos a la cola. Me sorprende que a la persona que tengo delante le dicen: “SEÑORA, EN SAN SEBASTIÁN VA A PERDERSE. SI NO SE ACLARA EN IRÚN, NO VA A ACLARARSE EN SAN SEBASTIÁN”. Esta respuesta por parte de la azafata me sorprende tanto y la veo tan poco adecuada que me pongo a escucharla. Como es evidente, esta señora le responde que gracias por los ánimos, por ayudarla y animarla de esta manera (evidentemente de forma irónica)

Me quedo sorprendida y pienso que he debido perderme alguna cosa de la conversación previa. Pero bueno, ahora me toca a mí. Me dice que no entiende porque tengo dos billetes. Y yo pienso que ella no sé porque tiene que entenderlo. Voy de Irún a San Sebastián y tengo billete. Punto. Me lo valida y le da un error. Ella misma se lía con otros billetes y me suelta sin venir a cuento un “chica, si no te explicas bien qué quieres que haga…”. No le contesto. Simplemente me pregunto (más tarde en el tren) ¿no será ella la perdida de la vida i de ella misma?, ¿No se ha planteado por qué a cada persona de la cola la manda de… “paseo”?, ¿No se ha planteado que a lo mejor el problema lo tiene ella?... No es tan gafe de tener a todos los torpes en sus colas (yo inclusive como torpe).

En fin, el tema es que llega el tren y subimos. Busco el coche 2 asiento 5C como veo escrito en mi billete. No lo encuentro, así que decido preguntar a otro trabajador. Este sí es amble conmigo y me dice que este tren es un cercanías. No hay coches ni asientos. En San Sebastián tengo que bajarme y cambiar de tren. Me siento donde me apetece y me bajo en San Sebastián donde vuelvo a encontrarme con la señora que estaba delante de mí en la cola.
Le digo ¿viaja usted a Barcelona, verdad? Me dice sí y le digo que iba detrás de ella en la cola de Irún y empezamos a hablar. Ella esta mosqueadísima. Yo, sorprendida. Ella no únicamente ha recibido mal trato en la estación de Irún, lo ha recibido ya desde esta mañana. Hablamos, me lo cuenta todo y nos vamos a tomar un café juntas. El tren no sale hasta las 16.10h, así que tenemos unos 45 minutos de tiempo. Me invita al café mientras yo me quedo vigilando el suyo y mi equipaje.

No es que nos sorprenda el mal trato de los trabajadores de vuestra compañía hacia nosotras. Es que nos sentimos ENGAÑADAS. No voy a hablar de su historia. Si quiere, ya lo hará ella. Pero, igual que a mí, la habéis engañado. Me cuenta otras historias de vuestra compañía y doy las gracias de no teneros donde vivo. Pero me comentan que mi billete cuesta 1,70€ porque es un cercanías. Pienso que ya lo consultaré desde casa.

Vamos a tomar un café. Podemos salir de la estación ya que nos han dado una tarjeta en Irún para poder entrar y salir. Yo le digo a la señora que como no me fío, no salgo. Miro por la estación y veo un bar dentro de la misma, pero como no vemos ninguna pantalla para saber por qué vía sale nuestro tren a Barcelona, esta señora decide salir y mirarlo. Me quedo esperando dentro. Pues bien, cuando vuelve a entrar la tarjeta le sale un error que pone “no más viajes permitidos” o alguna cosa por el estilo. Así que tengo que pasarle la mía por encima de las puertas para que pueda entrar. 

Nos vamos al bar que hay justo dentro de la estación. Al terminar el café vemos que han puesto una valla. NO NOS LO PODEMOS CREER. Nos han cerrado el paso por donde habíamos venido.

Llamamos a uno de los trabajadores de forma EDUCADA y nos vuelven a contestar de forma MAL EDUCADA. En un principio pensé que era cosa de la chica de Irún. Después vi que es por lo general en vuestra compañía que hay trabajadores poco educados. 

¿Hacéis la selección del personal midiendo la mala educación? Porque si es así, lo hacéis muy bien.

Me despido de la señora, ya que vamos en coches separados, y subo al tren donde a mitad de camino voy a tomar un café en la cafetería. Los camareros son amables conmigo ¡qué bien!, Pero la alegría dura poco… Llega un señor con una niña que no llega a dos años de edad. Son chinos y preguntan si por favor les pueden poner un poco de agua caliente en unos fideos que trae. El señor camarero le dice “bueno, vale, pero no te lo lleno”. Le pone un chorrito (mini) de agua caliente. El señor chino, al verlo, pregunta si le pueden poner un poco más. Y le dicen que no. Él insiste y es cuando interviene la chica camarera. Su respuesta es: “Señor, no podemos calentar comida de fuera. Usted trae fideos no sé qué y nosotros vendemos fideos Yatekomo”. El señor queda parado y contesta que no lo sabía y que para la próxima vez ya lo sabrá. 

¡POR FAVOR! ME PARECE RIDÍCULO. Cóbrame a mí también o cóbrale a él el vaso de agua caliente si para la compañía es tan políticamente incorrecto. De verdad, ¿dónde están los valores humanos en vuestra compañía? Entiendo que tenéis que poner unas normas, políticas, pero… ¡por-fa-vor! 

No tenía intención de nada, de pediros explicaciones por haberme cobrado 11,60€ en lugar de 1,70€, pero viendo la mala organización de Irún y San Sebastián, la mala educación de algunos de vuestros empleados… he decidido enviaros esta carta de manera formal, por mail y por donde haga falta.  
Seguramente os dará igual. Irá a la papelera y a correo no deseado. Tenéis miles de usuarios que no tienen otro remedio que usar vuestros servicios. Yo, por suerte la mía, como ya he dicho, no suelo utilizarlos. Pero sí que escucho hablar de vosotros casi a diario por la radio. Y no precisamente por el buen servicio que dais. 

Así que, en lo referente a mi caso, ¿podéis decirme por qué me habéis cobrado 11,60€ de un billete que cuesta 1,70€ o como máximo 5,00€, tal y como podemos observar en vuestra página web? (les adjunté el link a ellos), ¿Por qué me preguntaron si viajaba en preferente o turista si el único tren que podía coger era un cercanías? Si no hubiese dicho que hacía un viaje largo, ¿cuánto hubiese pagado?

Estoy escribiendo esto desde el tren… vete tú a saber que pasará hasta llegar a Barcelona… justo ahora hemos llegado a la estación de Zaragoza. 

Gracias

PD: a día de hoy no tengo respuesta...
PD: a día 18 de agosto de 2019 me han respondido vía correo electrónico que van a proceder, de forma excepcional, al ingreso en mi targeta, de la devolución del importe del billete de Irún a San Sebastián. 

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