v o l a r


MI PILOTO. 

Gracias, gracias, gracias por todos los momentos viajados a tu lado. A veces piensas que has sentido, que has estado enamorada, pero no es hasta que conoces a “alguien” que te hace sentir cosas que nunca antes habías experimentado. Y es en ese momento en el que te das cuenta de que el amor existe.

Gracias por estas nuevas sensaciones. Gracias por hacerme sentir la mejor. Gracias por hacerme sentir la primera cuando estábamos juntos (cuando en realidad era la última). Gracias por este amor eterno en las nubes. Gracias por hacerme reír. Gracias por dejarme sentir. Y gracias por dejarme llorar. 

Gracias por mostrarme cómo pilotas desde la cabina y ofrecerme un asiento en la última fila. (no seas desagradecida, todos vamos a llegar a la misma hora)




Aun así, volvería al avión infinitas veces más sabiendo que, aunque nuestro amor era infinito, nada dura eternamente. Volvería al avión aun sabiendo, antes de entrar, que nuestro viaje terminaría, también, antes de despegar.


Estuve dudando entre muchos viajes antes de subir a tu avión. Si decirte lo que sentía o no. Si preguntarte si sentías lo mismo o no.


Pero 
subí.



Y desde el primer beso sentí que esta adrenalina era mejor de lo que había imaginado. Nuestro beso fue como el despegue. Pero aun siendo así, ahora miro más por mí. No es una excusa decir que no quiero pasarlo mal. Es que ahora sé que merezco ser feliz. Y quiero serlo. Ahora quiero pasarlo bien.


Y quiero tener a alguien a mi lado con quién pueda pasearme por la calle, ir a comer a un restaurante, ir de viaje, a la playa, quedarnos en casa, darnos un beso donde nos apetezca. Estar juntos siempre en la cabina. 


No quiero esconderme más.
No quiero esconder que estoy enamorada.
No quiero esconder que estamos enamorados.


Y si tienes que ser tú, lo serás. Y si lo eres es porque tú situación cambiará. Y cambiará porque tú habrás hecho que cambie. Ya que ni yo ni nadie podemos decirte como pilotar tu vida.




Y por ahora, no lo has hecho. No ha cambiado nada.
Es por eso que te dejo la pista libre porque sé que de momento no lo harás.



Decirte, que ahora tampoco quiero que vengas conmigo, quiero que vengas un poco más para ti.


...

Y en un aterrizaje forzoso escribí con mis lágrimas y letras detrás de un papel dónde se podía leer: LIVE, LAUGH, LOVE y esto es lo que estoy haciendo.


Mientras tú sigues pilotando… tu vida nuestro viaje ha terminado.


Coral



Comentarios

Entradas populares de este blog

El sonido del ruido

¿Esperar de?

Acuérdate de vivir mientras esperas